Experiencia presencial. CARMI QUERÉTARO

Cada experiencia es diferente. Cuando puedes salir de la oficina, o de tu casa convertida en oficina, tocar la naturaleza, sentir el viento, los mosquitos, el sol, los árboles, el canto de los pájaros… La mirada sobre la vida cambia.

Meditar, escuchar, contemplar, jugar, tocarnos, mirarnos… es lo que pudimos vivir en la experiencia presencial en CARMI QUERÉTARO.

Aprovechando la coyuntura, la facilidad que la dirección dio de salir de la oficina, el tener la posibilidad de un espacio en el campo adecuado para ello, la disponibilidad de cada persona de invertir el tiempo de su sábado para estar ahí, la voluntad del equipo, el liderazgo del gerente y todos los elementos que se combinaron, hicieron posible un día completo de encuentro sin máquinas, sin clientes, sin teléfonos… sólo con la presencia de las personas dispuestas a vivir la experiencia.

La mitad de la jornada con MUSICOTERAPIA Y MEDITACIÓN, disponiendo el interior de cada uno para la comunicación auténtica y el despertar de la conciencia (si queremos una empresa consciente, tenemos que entrenar la conciencia individual) Creo que esa fue la gran diferencia, el aquietar el cuerpo relajándolo, silenciar la mente con la respiración y la música, conectar el espíritu con la meditación guiada. Esto nos dio la gran posibilidad de una pausa consciente y equilibrada.

La otra mitad, reflexionando con los elementos de la verdadera comunicación, integrando la mística y la mecánica de la misma, es decir la decisión de comunicarnos y las herramientas para hacerlo. Terminando esta segunda mitad con un ejercicio en equipo lúdico, al aire libre, con la actitud de cada uno de lograr un objetivo común.

Después un rico bufet de tacos, para cerrar con la convivencia muy a la mexicana.

Terminando la jornada con un ejercicio de cierre y evaluación expresando cada uno lo que la jornada la aportó. Transcribo algunas de las palabras y escritos de la evaluación: “Nunca había meditado, fue maravilloso hacerlo y sentir que todos mis problemas tomaban una dimensión diferente”; “Me gustó mucho encontrarme con mis compañeros y escucharlos y verlos y lograr un día de armonía”; “La reunión fue una experiencia muy grata, cómoda, realmente me pude enfocar en el tema sin distraerme con el trabajo. Espero que tengamos la oportunidad de seguir haciendo actividades como esta”; “diez de diez, estoy contenta y feliz de esta experiencia. Fue muy bueno tener este encuentro fuera de la oficina, que nos permite conocernos más y tomar conciencia de nuestras relaciones con los compañeros y con nosotros mismos. MARAVILLOSO, que se repita pronto” … En ese tono estuvieron todas las evaluaciones.

De mi parte y de parte de Iliana, mi esposa, que pudo estar presente coordinando la musicoterapia y también los detalles del lugar y la comida, también quedamos muy satisfechos y agradecidos.

¡GRACIAS EQUIPO CARMI Army QUERÉTARO!

José Luis Gómez Campos

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